jueves, 5 de febrero de 2009

Los Beatles


Si tuviera que elegir cuál es mi música popular preferida, ésta sería, con mucha diferencia, la de los Beatles. Creo que los Beatles son, en cuanto a la calidad, un fenómeno sin parangón en el mundo de la música popular urbana de todos los tiempos. Me parece ocioso el intento de compararlos con los Rolling Stones: quienes prefieren -y son unos cuantos- a los Rolling antes que a los Beatles están seguramente condicionados por razones extramusicales y por esa maldita manía de decir que los Beatles son “blandos”. Y aunque lo fueran, ¿por qué lo blando ha de ser peor que lo duro? Que me den razones objetivas para demostrar que lo blando es intrínsecamente malo. Como dijo el gran Diego A. Manrique, entre unos y otros “no hay color”. Los Rolling pudieron crear cuatro o cinco canciones memorables (Satisfaction, Paint it, Black, Wild horses, Brown sugar...) pero muchas otras mediocres, a diferencia de los Beatles, excelsos en casi todo lo que hicieron.

Las canciones de los primeros tiempos de los Beatles no diferían demasiado de las de otros grupos de su época, salvo en su calidad. Pero casi tan admirable como esta enorme calidad fue su constante evolución: sus canciones fueron haciéndose más complicadas armónica y formalmente, hasta llegar a un grado de complejidad y disonancia insólito en el pop y el rock.

Últimamente estoy volviendo a explicar los elementos básicos de la teoría del lenguaje musical en un curso de la ESO al que hacía años que no daba clase; por variar un poco el estilo de los ejemplos auditivos, intento buscar algunos en la música popular urbana. Y siempre son los Beatles los que me suministran esos ejemplos. ¿Compás ternario, tan escaso en el pop y el rock? You’ve got to hide your love away, Norwegian wood. ¿Mezcla de compás binario y ternario? We can work it out, Lucy in the sky with diamonds. ¿Homofonía a capella? El principio de Nowhere man. ¿Contrapunto? El principio de Paperback writer. ¿Instrumentos musicales de otras culturas? La citada Norwegian wood, Strawberry fields forever. ¿Una orquesta de cuerda? Eleanor Rigby. ¿Un solo de trompeta en estilo barroco? Penny Lane. ¿Disonancias propias de la música contemporánea? El final de la citada Strawberry fields forever y A day in the life. ¿Sonido ambiental grabado? A day in the life otra vez.

Por si fuera poco, el genial Pierre Charvet ha encontrado en los Beatles el que posiblemente sea el único ejemplo de una tercera de picardías que hay en la música popular urbana. En suma: si nos dedicamos a estudiar a los Beatles desde un punto de vista analítico, veremos que son muchos los elementos constitutivos de la música que se encuentran en ellos y en ninguna otra música popular urbana. Hasta en eso eran geniales.

9 comentarios:

Nanny Ogg (Dolo Espinosa) dijo...

Lo que tiene ser lega en una materia... Hasta ahora a mí, los Beatles me gustaban porque sí y tras leer tu post he descubierto una cantidad de cosas totalmente desconocidas. Me encanta :)

Besos

Maria Lourdes Alonso dijo...

¡Qué quieres que te diga!Genesis, para mi gusto, eran de una mayor envergadura artística.Pero, claro, se limitaban a ello. ser inmensos creadores, sin la etiqueta de la trangresión. O el gran Ian Anderson (merecía haber tenido más repercusión histórica)

Anónimo dijo...

Hola, muy buenas.

Blood, sweat and tears; Weather report; FRANK ZAPA... Los Beatles sólo tuvieron el mérito de un gran productor y un gran manager. Siento herir sentimientos, pero es mi pensar.

Y, ya sabes. Si buscamos elementos musicales sofisticados...jazz. Muchos más y mejor traídos que en, incluso, la clásica de nuestros días. O como se la llame ahora-

José del Rincón dijo...

Siento disentir de Michelangela y, sobre todo, de Jesús. ¿El mérito de Los Beatles se limitó al de su -excelente- productor y al de su mánager? No, por Dios. Y todo el germen del rock progresivo está en ellos, que ya habían destacado con canciones mucho más simples años antes.
Tampoco creo que el jazz sea más complejo y sofisticado que la actual música contemporánea. Me parece una opinión respetable decir que tales o cuales elementos musicales están mejor traídos en el jazz que en la música contemporánea, pero a complicación y sofisticación de los procedimientos, a ésta no le gana nadie.
Un abrazo.

Anónimo dijo...

Estoy encantado de que exista este blog, querido señor Pocho. Por cierto, espero darte pronto buenas noticias...

Sí, quizás sea un poco exagerado, reconozco en mí cierta venalidad que me hace no utilizar correctamente la gradación en mis expresiones. Pero he tenido la ocasión de escuchar el material que Lennon envió a George Martin de no se qué canción (recuerdo que la escribió en Almería...Strawberry fields?)y deja algo que desear, sobre todo al compararla con el producto acabado. McCartney acaba de sacar un disco con una obra orquestal y... no me ha dicho demasiado.

Pero bueno. Son mis opiniones y sólo a mí incumben.

Mi provocadora comparación entre el jazz y la contemporánea es fruto del hastío que me produce el abandono que sufrimos quienes cultivamos dicho género. Es verdad, no se nos reconoce titulación alguna, se nos mira por encima del hombro...

Soy un profundo admirador de Penderecky, de Gorecky, de Nono, Berio, Stockhausenn y muchos otros que ni recuerdo o de quienes ignoro directamente el nombre. La música no creo que sea ganar a nadie. Es más bien una cuestión de honradez y de actitud sincera y expuesta al oyente. De todo corazón creo que el jazz debe a la contemporánea y viceversa. En la misma medida. Esa sofisticación en los contrapuntos improvisados que Eric Dolphy le hace a John Coltrane, la prodigiosa interacción entre Ron Carter, Tony Williams y Herbie Hancock en el quinteto de Miles Davis; el asombroso don de Charlie Hadden para armonizar sobre la marcha las personalísimas ideas de Ornette Coleman; la impactante variedad rítmica de Jack deJonnette... la apabullante inventiva de Charlie Parker, a quien nadie oyó nunca dar una nota mala con su saxo...

No. No se trata de comparar. Ruego me perdones. Es que a veces siento como que el conservatorio se encerró en sí mismo y desprecia a lo que no es él.

Disculpa si he sido maleducado y... un fuerte abrazo, amigo y compañero.

Anónimo dijo...

¡Ah! Discrepa de mí cuanto más mejor

;-)

José del Rincón dijo...

No conozco ese material que Lennon envió a George Martin, pero sí pude escuchar Yesterday, de McCartney, en una versión en vivo, en una de esas grabaciones que antes se llamaban 'piratas'. Es cierto que el resultado estaba lejos de la genial versión de estudio, con el arreglo de Martin.
Un fuerte abrazo, compay. Me alegro de verte por aquí de vez en cuando.

Tany dijo...

Ah los Beatles son un referente, pero hay muchos mas. El mundo siempre ha producido talentos, en toda las épocas. Hay que tener la mente abierta y los oídos también y disfrutar la música en general.

José del Rincón dijo...

En mi caso, Tany, no creo que sea cerrazón (pues conozco otros grupos y solistas), sino que he llegado a la convicción de que ellos eran los mejores, con cierta diferencia respecto a los demás.